Rommel es recepcionado por niños y jóvenes clavadistas, tras su hazaña de Río

Mérida.- Medio centenar de niños y jóvenes clavadistas no dejaron de gritar el nombre de Rommel Pacheco Marrufo en el Aeropuerto Internacional Manuel Crescencio Rejón y Alcalá, quien esta tarde llegó luego de triunfar en Río de Janeiro y se volvió noticia internacional por cantar el Himno Nacional mientras en el estadio se escuchaba el de la Federación Internacional de Natación (FINA).

Y es que los pequeños clavadistas y sus entrenadores fueron a esperar a la estrella de los clavados en México, quien agradeció el gesto y aprovechó para platicar con los medios de comunicación, entre ellos Podio Deportes, sobre su hazaña en Brasil y lo que viene en su carrera.

“Estoy contento y feliz con el resultado, son muchos años de esfuerzo y dedicación para el oro en individual y bronce en sincronizados, en buen momento previo a Juegos Olímpicos”, indicó.

Se dijo ajeno al problema entre la FINA y las autoridades mexicanas, lo que derivó en el castigo para la Federación Mexicana de Natación, por el adeudo de la cancelación de Campeonato Mundial en Guadalajara.

“Si es un tema donde yo no tengo mucha injerencia, yo me dedica a trabajar y buscar buenos resultados, competir de la mejor manera”, dijo, ya que muchos ven su acción de cantar el Himno a capela como una protesta.

Rommel no tiene problemas en imaginarse en lo más alto del Podio en Río de Janeiro, pero en los Juegos Olímpicos.

“Me lo imaginé, al concluir la competencia y ver el estadio. Creo que cuando compita en los Juegos Olímpicos estará lleno de banderas mexicanas. Me encantaría, ese es el sueño que he estado buscando durante todo estos años, ahorita de aquí a cinco meses vamos a trabajar fuerte y en agosto buscar algo importante”, señaló.

“Antes de la competencia estaba visualizado como se sentiría estar en el estadio, y después ya vació. En la competencia hay muchos nervios y las adrenalinas y esperamos que en cinco meses se repita lo mismo”, indicó.

Sobre la recepción de los amigos y familiares, Rommel Pacheco se dijo feliz.

“Estoy feliz de regresar a Mérida, gracias a todos, que siempre me siguen a lo largo de mi carrera, mi mamá, mi hermano y los niños”, señaló.

Por último, dijo que llegar a Río como campeón le aumentará presión, pero hay que dejarla y seguir entrenando.

Por lo pronto, en su estancia en Mérida, va a trabajar en el aspecto físico ya que en 10 días va a salir a la Serie Mundial de Clavados de Dubai.- Esteban Cruz Obando